México despide conmovido a Alicia Matías Teodoro, la mujer que se convirtió en símbolo de amor y sacrificio tras la tragedia ocurrida en Iztapalapa, donde una pipa de gas explotó causando muerte y destrucción.
En medio del caos, Alicia se interpuso entre su nieta de apenas dos años y la devastadora explosión, protegiéndola con su propio cuerpo. El acto de valentía permitió salvar a la niña, pero dejó a la abuela con quemaduras en el 98% de su cuerpo. Pese a los esfuerzos médicos, no logró sobrevivir.
Su historia se ha convertido en un ejemplo de heroísmo maternal y de amor incondicional. Familiares, vecinos y ciudadanos la recuerdan como una mujer fuerte, solidaria y entregada a los suyos. Su sacrificio será recordado no solo por su familia, sino por toda una comunidad que la despide con gratitud y lágrimas.
Alicia deja una lección profunda: la importancia de valorar y proteger a los seres queridos, y de comprender que el amor verdadero es capaz de gestos que trascienden la vida misma.