La Corte Constitucional falló a favor de la libre comercialización del aguardiente en el país, permitiendo que marcas como el Aguardiente Amarillo de Manzanares ingresen sin restricciones a cualquier departamento.
Fin de un monopolio de más de un siglo
La decisión, tomada con una votación de cinco contra cuatro, anula la facultad que tenían los gobernadores para impedir la entrada de licores de otros departamentos. Hasta ahora, varias regiones restringían la venta de aguardientes externos para proteger su producción local, como ocurrió en Cundinamarca con el Aguardiente Amarillo en junio de 2023.
Pablo Felipe Robledo, ex superintendente de Industria y Comercio y demandante en el caso, explicó que la medida restablece la libre competencia en el sector: “Los ciudadanos elegirán qué aguardiente consumir, sin imposiciones de los gobiernos departamentales”.
Impacto en el mercado y expansión de la Licorera de Caldas
Con este fallo, cerca de una docena de departamentos deberán eliminar de inmediato sus restricciones, permitiendo la venta de cualquier aguardiente en sus territorios.
La Industria Licorera de Caldas (ILC), productora del Aguardiente Amarillo y Cristal, ya anunció que solicitará su introducción en los mercados donde antes tenía prohibiciones. “Es un hito histórico. Se abre un nuevo panorama de competitividad para nuestro aguardiente y para el sector licorero del país”, afirmó Diego Angelillis Quiceno, gerente de la ILC.
¿Qué sigue en la disputa entre Caldas y Cundinamarca?
Aunque el fallo de la Corte allana el camino para la comercialización del Aguardiente Amarillo en todo Colombia, el pleito entre la Licorera de Caldas y Cundinamarca sigue en el Tribunal Contencioso Administrativo. La ILC espera la admisión de su demanda para determinar los próximos pasos.
Con este fallo, la comercialización de aguardientes en Colombia cambia para siempre. Ahora, el mercado y los consumidores decidirán qué licor prefieren, sin barreras impuestas por las autoridades regionales.