Claudia Silvana Torres López, de 19 años, fue enviada a prisión preventiva tras ser señalada como la responsable de la muerte de su hija Antonella, una niña de apenas dos años, en un trágico hecho ocurrido el pasado sábado 26 de julio en un apartamento del barrio San Sebastián, en Manizales.
La joven fue imputada por la Fiscalía por el delito de homicidio agravado, que contempla penas de entre 33 y 50 años de prisión. Aunque no aceptó los cargos, deberá permanecer recluida mientras avanza el proceso penal. La defensa intentará argumentar una posible inimputabilidad por alteración mental transitoria.
Un informe de la Clínica Psiquiátrica San Juan de Dios revela que Torres declaró ante especialistas: “Yo me enceguecí, me llené de rabia y lastimé a mi hija. Después quise morirme”. Aunque expresó arrepentimiento y negó que el acto fuese motivado por venganza, aseguró que, tras alimentar a Antonella y visitarse con su hermana, regresó al apartamento, tomó un cuchillo y afirma no recordar lo que ocurrió después.
Los gritos y el llanto alertaron a los vecinos, quienes dieron aviso a la Policía. Al llegar, una patrulla encontró a la niña sin signos vitales. La pequeña estaba a punto de cumplir tres años.
El país entero se estremece ante este caso de filicidio, mientras se esperan nuevas decisiones judiciales sobre la responsabilidad penal de la joven madre.
